lunes, 9 de agosto de 2021

No hay otros datos

 

Ni existen ni pueden existir, más que de una sola forma: que estés mintiendo con la intención de cometer fraude. Veamos.

Digamos que eres una empresa pública y tienes que dar reportes periódicos a tus inversionistas. Esos reportes tienen los datos oficiales de la empresa, dados por los contadores y los ejecutivos y aprobados por el departamento legal. Esos datos, una vez presentados al público, son usados para tomar decisiones.

El dato dice que la tendencia es a la baja, se toma una decisión; el dato dice que la tendencia es a la alta, se toma otra decisión distinta. Ambas decisiones son con miras a corregir o mejorar, según sea el caso.

Si esos datos son falsos, por ejemplo que reportas menos pasivos o más ganancias o cualquier otra cosa que afecte el sentido de las decisiones que se toman a partir de ellos, es un delito. Hay reponsables y existen penalizaciones severas, incluyendo cárcel.

Ahora bien, sí puede haber “otros datos” distintos del reporte, en un único y especial sentido:

Este tipo de reportes se toman bastante tiempo, y puede ser que al momento de presentarse, los ejecutivos sepan que los datos no son exactos. Esto es, que no sean los números más actualizados.

Pero no es posible que el reporte diga una cosa acerca de la tendencia, y los datos actualizados a los que siempre tienen acceso los ejecutivos digan la cosa contraria. Esto es,  sí puede ser que el número presentado sea 1238 y en realidad sea 1255, pero no puede ser que el reporte diga “vamos a la alta” y en realidad sea “vamos a la baja”.

Si en efecto ese es el caso, porque algo catastrófico sucedió en mitad de estar haciendo el reporte, ninguna persona responsable dejaría de incluir ese cataclismo. El hacerlo sería no profesional, no ético, y puede llegar a ser criminal.

Así que cuando alguien dice, ante una pregunta basada en datos oficiales, que “tiene otros datos” muy distintos, sólo puede ser una de dos cosas:

(1) En realidad tiene datos muy distintos a los oficiales, lo cual es absolutamente inadmisible en una empresa, ya no digamos en una institución pública, porque constituye probable intento de fraude, ó

(2) Está mintiendo desvergonzadamente.

 

No hay más datos.

 

    

1 comentario:

  1. Totalmente de acuerdo. He visto como jefes se retuercen ante el director por el mal desempeño que tienen, sudan, se acongojan, pero aguantan vara y esperan las consecuencias. Eso en gente normal. López, por su parte, no siente que deba rendirle cuentas a nadie. Mal, mal y de malas. Saludos, estimado Alfonso. Gisela

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