Guía para paranoicos, Parte I

Signs, Touchstone Pictures

¿Es usted una de esas personas que usa un gorro hecho de papel aluminio, para que el gobierno no pueda controlar su mente con ondas enviadas desde un satélite? ¿Usa sólo teléfonos públicos para que no rastreen sus llamadas?  ¿No usa el internet porque tiene la marca de la Bestia? ¿Su película favorita es La Conspiración de Mel Gibson? ¿Sigue religiosamente a David Icke?

Pues resulta que tiene usted razón. O bueno, algo de razón. Por favor deje de leer a David Icke.

Pero si está leyendo esto, es que está en el internet y ya se resignó a perder todo tipo de privacidad. Así que veamos algunas tecnologías que suenan futuristas pero que YA FUNCIONAN y que se están usando activamente para espiar, ejem, a “potenciales terroristas”.

Y A USTED, por supuesto.

SU CELULAR PUEDE LEER TODO LO QUE ESCRIBE EN SU COMPUTADORA.

¿Tiene usted un smartphone? ¿Uno de esos que tienen sensor de movimiento y que cambian las fotos de horizontal a vertical? ¡Qué bien! Y seguro lo mantiene en su escritorio, cerca de su computadora, para poder tomar rápidamente cualquier llamada o ver de inmediato cualquier foto que le envíen (seguro de algún gato con mala gramática, o de una frase inspiracional de Lope de Vega pero atribuída a Gandhi).

Pues bien, le tengo malas noticias.

Un grupo de investigadores de Georgia Tech desarrolló desde 2011 una aplicación para que su celular pueda detectar, por medio de su acelerómetro (así se llama el sensor de movimiento) TODO LO QUE ESCRIBE. El programa es bastante complejo, porque primero tiene que calcular la distancia que lo separa de la computadora y una vez hecho eso, puede detectar —gracias a las vibraciones que se transmiten por el escritorio cuando usted trabaja— todo lo que está tecleando. 

TO.DO.

El programa crea un ‘mapa’ del teclado, con cada tecla a una distancia fija del celular, y así sabe cómo interpretar las vibraciones que percibe. De modo que puede leer sus cartas alcoholizadas a la novia que no quiere saber más de usted; o los innombrables websites que visita. Pero más importante: puede leer sus passwords y, si las usa online, los números de sus tarjetas de crédito. 

¿Qué tan exacto es este software? No para que se preocupe demasiado, pero: 80%.

EL CELULAR PUEDE ROBARSE LA INFORMACIÓN DE SU TARJETA DE CRÉDITO CON SÓLO PASAR CERCA DE USTED.

Ya lo estoy oyendo: “What. ¿Otra vez el maldito celular? ¡Pero si ya lo puse en mi bolsa, lejos de la computadora!”

Sí, bueno, bien hecho. Pero malas noticias otra vez. 

Ahora muchas tarjetas de crédito salen con una nueva tecnología (RFID) que no necesita de contacto, sino simplemente de cercanía con el lector. Y adivine qué: el software que usan esos lectores, ¡también puede ser instalado en un celular!

En 2012, en la conferencia de hackers DefCon, en Las Vegas, el hacker Eddie Lee demostró su software que hace eso exactamente: tan sólo necesita que un malandro futurista pase cerca de usted en el pasillo del supermercado, para robarse la información de su tarjeta, y no sólo eso: la puede mandar instantáneamente a un secuaz con otro celular, que seguramente está en una tienda de lujo, sólo esperando recibir números para pasarlos y hacer compras con ellos.

¿Debe preocuparse?

Um, baste decir que la aplicación creada por Eddie, ya se puede descargar gratis del internet. Así que vaya considerando envolver su tarjeta de crédito en una cajita de plomo, como si quisiera protegerla de la visión de Rayos X de Supermán.

ESA CUCARACHA QUE ACABA DE ESCONDERSE TRAS EL REFRIGERADOR, LO ESTÁ ESPIANDO.

Esto podría parecer una cosa salida del laboratorio de Q, si no es porque James Bond nunca perdería el estilo cazando cucarachas para instalarles una cámara o un micrófono en la cabeza. Quizá un galgo afgano, pero una cucaracha no.

Pero DARPA —la famosa agencia de investigación militar de EEUU— aparentemente no es tan quisquillosa como el MI-6, así que hicieron eso exactamente.

Y usted preguntará, ¿cómo van a saber a dónde diantres va a ir la cucaracha? Lo más probable es que termine en un agujero asqueroso. Pues resulta que eso fue en lo primero que pensaron, así que el micrófono es lo de menos: lo que hicieron fue instalar un chip en el cerebro de la cucaracha, para controlarla. Así es. Tenemos ya RoboCopCarachos.

Vaya haciendo sus provisiones de Raid Matabichos.

SU MONITOR PUEDE SER ESPIADO AL DETALLE.

“No no no no no”, usted dirá.  “Tengo el mejor antivirus, lo actualizo y lo corro diario. Y cuando estoy haciendo cosas importantes (como la carta alcoholizada) incluso me desconecto del internet.” ¡Estoy seguro!

Todo eso está muy bien. Pero más vale que su monitor no esté cerca de ninguna ventana, porque hay una cosa que se llama “espionaje electromagnético” —o si lo quiere en idioma más nerd todavía, Phreaking de Van Eyck— que lo que hace es VER directamente el monitor.

Con una antena que se puede conseguir en cualquier tienda de electrónicos, un osciloscopio robado del laboratorio de la universidad (me dijeron que son fáciles de robar…) y un software decodificador, esto es posible. 

¿Cómo?

El monitor crea sus imágenes por medio de rayos de electrones que ‘barren’ la pantalla a muy alta velocidad, y este movimiento del barrido crea una señal de radio con una forma de onda específica, que puede ser captada y decodificada con el equipo descrito antes.

¿Que si está muy avanzada esta tecnología? Ya estará esperando una nueva mala noticia, así que aquí la tiene: la tecnología se desarrolló y ya era funcional en... 1985.

SUS CONVERSACIONES PUEDEN SER ESCUCHADAS FÁCILMENTE.

“Whaaaat. No puede ser. Mi celular está en una bóveda y mi laptop la uso sólo en el sótano. Mi tarjeta de crédito está envuelta como los pies de un mafioso traidor antes de aventarlo al río. Tengo scanners de cucarachos instalados en toda mi casa, y cada semana le hablo al Detector de Micrófonos Ocultos que encontré en la Sección Amarilla, y me dice que no hay micrófonos en mi casa.”

Sorry, pero este artículo se llama Guía Para Paranoicos. Más malas noticias.

Aunque no tenga ningún micrófono en su casa, y haya comprado los mejores interceptadores de señales, hay un detalle: cuando usted habla, crea vibraciones en el aire con su voz. Y su voz va y choca en todos lados. Uno de esos lados es la ventana. Y adivine qué pasa cuando su voz choca en la ventana: la ventana vibra. Vibra muy poquito, sí. Es casi imperceptible. 

Esto es, imperceptible para el ojo humano, pero no para un láser.

El Micrófono Láser es eso exactamente: usted lo dirige hacia una superficie vibratoria, como una ventana, y el láser, siendo un rayo de luz que viaja infinitamente más rápido que el sonido, fácilmente puede registrar las vibraciones de la ventana e interpretarlas con un software decodificador.

“Pero bueno”, preguntará usted de nuevo tercamente, “Eso sí que suena a equipo altamente especializado que sólo James Bond o la CIA pueden tener, ¿no?”

Aquí puede comprarlo, en la muy aptamente llamada Detective Store. O si es de quienes gustan de los Hágalo-Usted-Mismo, aquí puede ver las instrucciones para construir el suyo en su propia casa.

¡Que duerma tranquilo!

VIDEO DEL DÍA

“El Egoísta” es una animación de 1996 realizada por Alain Gagnol y Jean Loup Felicioli, cuya sencilla historia no deja de ser brutal por su final. Fue hecho con una intersante estética que mezcla ilustraciones infantiles con el estilo cubista de Picasso:

 

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