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| Huffington Post |
Hay veces que desesperamos y el mundo parece un lugar realmente
horrible. Las noticias nos bombardean con las cosas más desesperanzadoras que
hace el ser humano: disturbios en Siria, plátanos arrojados a Cecile Kyenge,
espionaje mundial, Nevada Tan. No voy a poner links de nada de eso y le sugiero
al lector que los busque (porque también hay que saberlo) en otro momento. Hoy
más bien le quiero decir que por todos lados siempre hay cosas más buenas que
malas, porque así somos los seres humanos, pero por alguna razón somos más bien
morbosos y tendemos a pasar por alto estas noticias. O será que los hacedores
de noticias las relegan a la página 15. En cualquier caso, no debemos olvidar
que en todos lados pasan cosas como estas, todos los días, y en ellas hay que
pensar también:
HARRIS ROSEN Y TANGELO PARK
¿Quién? ¿Dónde?
Rosen es un hotelero millonario de Florida. En 1993, el gobierno local
estaba haciendo esfuerzos por mejorar un barrio pobre llamado Tangelo Park, que
estaba en pésimas condiciones e infestado de vendedores de drogas. Él no sólo
dijo sí, sino que invirtió 8 millones de dólares y creó un programa piloto de
educación, para asegurar que los niños de ese barrio fueran a la escuela. El
programa incluye educación básica gratuita para niños pequeños, becas hasta
universidad, un centro de orientación familiar, y más recientemente áreas de
esparcimiento y gimnasios. El nivel de educación de Tangelo Park se ha
disparado y está muy por encima de la media nacional, comparado con barrios de
condiciones equivalentes.
MOROS Y CRISTIANOS (JUNTOS)
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| Ahram.org |
Decir “musulmanes y cristanos” en la misma oración normalmente va
seguido de alguna atrocidad. Y de hecho tras los primeros disturbios en Egipto
en 2011, hubo 21 cristianos muertos a manos de islamistas radicales tras un
ataque a una iglesia en Alejandría. Sin embargo, esto enardeció a la población moderada
- que es mayoría - y en la noche de
Navidad, miles de musulmanes aparecieron en las iglesias cristianas de todo el
país con letreros que decían “Vivimos juntos y moriremos juntos”, declarando a
la prensa: “Si los fanáticos quieren matar a nuestros hermanos cristianos,
tendrán que matarnos a nosotros primero.”
DE HIMNOS Y NIÑOS
Hace dos meses, Sebastien de la Cruz, un niño estadounidense pero de
ascendencia mexicana de 11 años, cantó (maravillosamente) el himno nacional de
su país durante la apertura de un juego de basketbol profesional. Nada
soprendente, sino por el hecho de que Sebastien
cantó el himno vestido de charro mexicano.
Este sencillo acto causó una ola de comentarios racistas en el internet, que pedían al niño ¡“regresar a su país”! En una entrevista, el pequeño contestó con un aplomo que ya quisieran muchos adultos, diciendo “No son más que opiniones, y no me afectan. Yo soy un orgulloso ciudadano americano. Amo a mi país y también a mis orígenes.”
La opinión pública se volcó inmediatamente a su favor y los internautas se dieron a la tarea de humillar públicamente a cuanto racista se pudieron encontrar en los foros de discusión.
¡Ajúa, all right!
En otro post me referí a un cuento chino que dice que muchas veces
tenemos que esperar para ver lo malo de lo bueno y viceversa. Una de las cosas
más espantosas de los conflictos bélicos son sus secuelas y dentro de estas,
los campos minados son de las peores. Tanto que muchos siguen siendo mortales
muchas décadas después y son peligrosísimos de limpiar. Uno de estos infames
campos minados se quedó en Argentina, después de la Guerra de las Malvinas de
1982.
Pero algo curioso pasó en este lugar, que por derecho debería ser un campo de terror: en esa zona cercana a la Patagonia, los pinguinos crearon un santuario donde empezaron a reproducirse felizmente. Hasta ese momento, estaban en peligro de extinción por el exceso de pasteo vacuno, pero una vez que el lugar se llenó de minas, ni hombre ni res pudo acercarse de nuevo, y ya que los pinguinos no son suficientemente pesados para activar las minas, han creado su propio hogar inatacable.
30 AÑOS DE FELICIDAD
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| Huffington Post |
En el estado de Tennesse viven las ‘Nueve Nanas’, como les gusta
llamarse a sí mismas: nueve mujeres sorprendentes de entre 54 y 72 años de
edad, que han mantenido una sociedad secreta por 30 años.
Pero en vez de conspirar para conquistar el mundo, se han dedicado todo ese tiempo a “crear felicidad” según sus propias palabras. Ponga atención el lector a la siguiente descripción de lo que hacen:
Cada mañana, por 30 años, las Nueve Nanas se han reunido de las 4 a las 7 de la mañana para hacer tantos pasteles como pueden, que mandan a docenas de direcciones por UPS sin que nadie - ni sus propios maridos - jamás se enteren de su origen. Durante su vida diaria, escuchan las conversaciones del pueblo, se enteran de quién tiene algún problema o ha sufrido una pérdida, y al poco tiempo juntan dinero para pagar una cuenta ó enviarle algo que esa persona necesita - siempre acompañado de una nota que dice “Alguien Te Quiere” y un pastel.
Treinta. Años.
Todos.
Los.
Días.
Sí, puede leer todo eso de nuevo, en caso de que no pueda dar crédito. No hay ningún error. Por cierto: la sociedad sigue siendo secreta, la entrevista se concedió de forma anónima y la gente sigue sin saber la identidad de las Nueve Nanas.
En otro post, conté el cuento chino del ‘Viejo que Movió las
Montañas’. Pues bien, Dashrath Manhji, habitante de las montañas de Gehlour en
la India, es la encarnación de ese cuento. Hace 23 años, su esposa cayó por
entre las piedras y se lastimó gravemente, y como en esos lugares montañosos no
había acceso rápido a un hospital (el más cercano estaba a 60 km), no la pudo
salvar.
Después de esa tragedia, Dashrath vendió sus cabras, compró picos y palas, y se dedicó a hacer un camino entre las montañas para conectar a su aislado pueblo con la población grande más cercana, reduciendo la distancia de 60 km, a sólo 6. Esto para que nadie tuviera que experimentar otra vez una pérdida como la suya. El paso se llama ‘Camino de Manhji’.
Véalo usted mismo, si le cuesta trabajo creer la historia:
VIDEO DEL DÍA
Este video es de una de las maravillas de la tecnología moderna: un despegue completo de una nave espacial. El sonido del video es real, captado por micrófonos puestos en la base y en la nave misma. ¡Disfrute de esta maravilla!
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